25 de enero de 2009

EL VALOR DE LA REALIDAD

"Odio la realidad, pero es en el único sitio donde se puede comer un buen filete". (Woody Allen)


En el primer post que escribí en este blog, justo antes de huir al Reino Unido, decía que odiaba todo lo real. Que era preferible soñar, que la realidad no daba la talla. Supongo que por eso me iba. Había algo a mi alrededor que sentía que fallaba, así que cambié mi entorno para ver qué pasaba. Vivir en Glasgow fue una fantasía y como tal tuvo que acabarse. ¿Es por eso peor el ahora? ¿Por qué es más real? Las circunstancias que nos rodean son un espejo de nosotros mismos. A veces, aunque insistimos compulsivamente en cambiar lo que nos envuelve, el reflejo que vemos es siempre el mismo: ese nosotros tan anodino y doloroso. Sin embargo, hoy quiero apostar por la realidad. Quiero hacer las paces con ella de una vez, ya que es el único sitio en el que se puede ser realmente feliz. Y yo quiero ser feliz, finalmente, aquí y no en mis fantasías. ¿Soy un ingenuo? ¿Es imposible? Quizás sí. Pero esta vez me siento lleno de fuerza y optimismo para luchar por la realidad y no contra ella. Por una realidad digna, llena, que valga la pena. ¿La hay? Hoy creo que sí. Aunque sea en la ficción donde tenemos el control total (o la evasión total); aunque sea en las fantasías donde soy escritor, actor, dibujante, cómico, filósofo y superman y todo lo que quiera. Aunque en la realidad sólo sea yo. Quizás eso no sea poco, aunque sienta que no soy nada (nihilántropo yo). La realidad tan imperfecta, tan injusta, tan barroca, es el único lugar en el que mis proyectos pueden realizarse, en el que mis labios se encuentran con tus labios, mis dedos con tu espalda. La realidad, ese lugar tan valioso en el que vivo, crezco, amo, lloro, siento, veo, huelo, río, me emociono. En ese sentido, ninguna fantasía podría estar a la altura.

5 comentarios:

Rafael Arenas García dijo...

"Un sueño en carne transformado". Eso escribí una vez. Me parece que a tí te pasa algo parecido. ¡Estupendo!

Anónimo dijo...

Que bonita frase, Rafael. Pues sí. Es exactamente eso :)

Olga Martínez dijo...

"El día que Nietzsche lloró" de Irvin D. Yalom. Te gustará y te hará pensar.

Contenta de que hayas echo las paces con la realidad y que la elijas como escenario. Yo tb intento hacerlo.

Un beso.

miri momentos de inspiración dijo...

Me ha gustado mucho lo que has escrito y tienes toda la razón. Es muy bonito soñar, pero si no vivimos la realidad no estamos viviendo nuestra vida, sino una vida imaginaria... Pero bueno, nunca hay que dejar de soñar... "que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son".

Anónimo dijo...

Me alegra por una vez, sentirte con esas fuerzas y esas ganas de felicidad, y te dire...si! es posible! por que no iba a serlo!


Ahora que ya no lo usaras, prestame ese mundo de fantasia, lo necesito, prometo devolvertelo intacto.


Aun tenemos un cafe pendiente, no lo olvido:)

T'estimu.

Ella Baila Sola