13 de febrero de 2008

DESDE LA TRISTEZA

Álex me pregunta: "¿Cuándo vas a dejar de escribir desde la tristeza?". Me gustan las preguntas. Me gustan más que las respuestas. Las preguntas abren, las respuestas cierran, y yo quiero abrir, siempre abrir. No hay una respuesta contundente, firme, que resuelva; pero sí hay preguntas maravillosas que te llevan por caminos mágicos, que te abren los ojos y te dejan ver con claridad unos segundos. Álex me pregunta con la ingenuidad de un niño; con la sabiduría de un maestro budista. Álex es un regalo. Mi regalo.

¿Crees que lo que escribo es triste?
No, pero está escrito desde la tristeza.
¿Y por qué será?
Está en tu naturaleza.
¿Y por qué?
Deja de hacerte preguntas, filosofillo me sonríe.

MULA

Hoy vuelve a estar nublado, pero las últimas dos semanas ha estado haciendo sol cada día. Ha sido tan raro que los habitantes de Glasgow iban por las calles con cara de susto, como si se acercara el fin del mundo o algo peor. Los pelirrojos no salían de casa. Y yo y Sara, Elisa, Ifa y los demás íbamos por las calles gritando: "Sunny! Sunny!" como idiotas. Ya sabéis que no hay persona más feliz que el idiota. Pues la idiotez de ver salir el sol ha sido lo más bonito de los últimos meses. No sabéis lo bella que es Escocia cuando sale el sol. Esos parques tan verdes, un cielo tan azul. Es un paraíso. Sin embargo, para que así sea, de la forma más natural, necesita de su mal tiempo, de su lluvia constante y sus nubes grises. Esa lluvia alimenta este entorno: los árboles, los campos, los prados extensos y llenos de vida que sin el mal tiempo no existirían. Y de repente un día, sale el sol y los pajaritos cantan; las ardillas corren entre tus pies durante tu diario camino a la universidad; sale el arcoiris y todo es brillo y armonía. Es hermoso. Glasgow se abre como una flor; una mariposa renaciendo desde la tristeza.

Aprovechando el buen tiempo, el sábado salimos de excursión. Saint Andrews es la antigua capital de Escocia y la actual capital mundial del golf. Tiene varios de los campos más importantes del planeta, dicen. No les hace falta regarlos, así que sale barato y ecológico. También tiene un castillo y una catedral en ruinas junto a un cementerio como los de las películas. Lejos de dar miedo, es una maravilla de lugar para pasear. Dan ganas de morirse para quedarse allí enterradito toda la eternidad. Luego, visitamos la calle principal, muy turística, muy mona. Adoro las casitas pequeñas. Y vimos la playa donde se rodó la escena de los atletas corriendo de "Chariots of Fire". Y el parque botánico. A la vuelta, estaba agotado y dormí como un bebé. Feliz. Haciéndome preguntas en sueños. Contento de estar aquí, de todo lo que estoy viviendo. Orgulloso de mí mismo y de mi naturaleza. Dormí con una sonrisa; abierta como un rayo de sol. Como un interrogante. Como Escocia después de la tormenta. Como un homenaje a la vida... desde la tristeza.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Dias de nubes, de tormentas, de niebla son necesarios para apreciar desde la idiotez la salida del sol, el canto de los pajaros,....y viva los idiotas!

Tu? De excursion?

...no dire nada....:P



Escribe desde donde quieras pero escribe, no para resolver esas preguntas sino para hacernos a todos formularnos mas preguntas.


Escocia debe ser bonita...pero vuelve:(


Un beso con sabor a pasado!

Fdo: Ella Baila Sola

Kapi dijo...

No puedo dejar de evidenciar lo que ya has dejado claro. Tú, como Glasgow, necesitas de la lluvia en el alma.
Como dijo el afónico al que amamos, "En los días de Sol no se escribe, se vive."
Me has hecho reir un montón con tu día de Sol.
Un abrazo enorme y que vivan los días de Sol y Lluvia así en el arte como en la tierra.

Anónimo dijo...

apreciamos mas el sol cuando no hace mas que nubes, apreciamos mas el calorcito cuando no hace mas que frio y es que yo amigo mio, también estoy deseando el calorcito, porque aqui al sol se le ve, pero el viento y aire frio nos encierra en casa como si el sol no existiera solo para hacernos entender que es de dia y nada mas.

Baci, kiss and besos de Juliana